Una parte fundamental de las películas son los escenarios en los que acontecen las historias. Muchas son las ciudades que han sido testigo de grandes obras maestras del séptimo arte. En esta nueva entrada de nuestro blog os presentamos estas increíbles localizaciones naturales convertidas en reclamo turístico por fans y amantes de la naturaleza de todo el mundo.

- Columnas del cielo, Hunan (China). Escenario de Avatar, la última superproducción de James Cameron. Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, este conjunto de increíbles montañas rocosas se utilizó como prototipo para recrear la montaña “Halleluha”, lugar sagrado para el pueblo de los na'vi. En la guía turística del lugar se describe como “un pico aislado de 200 metros, con una cima cubierta de follaje y una sección intermedia rocosa, que se alza como un pilar que conectara el Cielo y la Tierra”.

- Playas de Phi Phi, Tailandia. Leonardo DiCaprio enamoró a más de una en la película del año 2000 La Playa, en la que interpretaba a un joven aventuro que descubre una paradisíaca playa secreta. El escenario real se encuentra en el continente asiático, concretamente el la isla de aguas cristalinas Kho Phi Phi Leh, rodeada de acantilados sumergidos en el océano. A pesar de que en 2003 se abrió a la visita turística sigue siendo una playa virgen de belleza única.

- Matamata, Nueva Zelanda. El Señor de los Anillos es una de las películas de los últimos años que cuenta con uno de los paisajes más bellos del mundo. En la localidad de Matamata-Piako se situó la ciudad ficticia de Hobbiton, hogar de Frodo y sus amigos. En la realidad se trata de una pequeña aldea rodeada de verdes colinas atravesadas por el río Waikato. Tras el rodaje de la película se decidió conservar los agujeros hechos en las colinas para albergar la casa de los hobbits, ya que se consideró que no alteraba el paisaje de esta zona rural.

- Cataratas de Iguazú, Argentina. Este país sudanericano fue escenario de La Misión, una de las películas más famosas del cine. Esta historia de conflictos morales, religiosos y ecológicos fue rodada en este salto de agua considerado una de las siete maravillas naturales del mundo moderno. Concretamente la película se sitúa en el Parque Nacional de Argentina, en las verdes montañas que se levantan alrededor de este espectáculo de agua.

Foto: Maleische Archipel