Empresas B, ¿te atreves?
Desde hace unos meses se está hablando mucho de las llamadas Empresas de tipo B pero, ¿sabemos realmente lo que son? Pues ni más ni menos que negocios que nacen con el objetivo de aportar un beneficio social y no económico. Es decir, son organizaciones innovadoras que utilizan el dinero no como razón de ser sino como herramienta para poder lograr sus objetivos.
Y, ¿cuáles son? Pues el crear nuevos y diferentes sistemas de producción y consumo, teniendo un trato directo con la sociedad y adaptándose a sus necesidades. Todo ello respetando al máximo el medioambiente e intentando trasmitir a los consumidores valores positivos.
El hecho de utilizar el poder de estas compañías para resolver problemas sociales y medioambientales de forma transparente es un punto a favor para estas empresas, que gozan de mayor confianza frente a multinacionales de las que desconoces la forma de trabajo y el impacto de sus acciones.
Este modelo empresarial nació en Estados Unidos y se fue expandiendo por países Latinoamericanos como Brasil o Argentina como consecuencia de la crisis económica mundial. El ejemplo de que en tiempos de crisis el ingenio y la imaginación se agudiza en busca de un rayo de luz, intentando adaptar nuevas ideas que resulten sostenibles y beneficiosas teniendo en cuenta las circunstancias.
Marcas como Innodriven (http://innodriven.com/) han ayudado a muchos jóvenes emprendedores a poner en marcha este tipo de negocios, en los que la innovación y el beneficio tanto individual como hacia el ecosistema son la prioridad número uno. Otro proyecto de estas características es Ballon (http://balloonchile.com), iniciado en Chile por tres amigos que buscan fomentar el desarrollo de las zonas con menos recursos a través de métodos innovadores para los que el turismo rural y el contacto directo con el entorno natural son indispensables.